miércoles, 18 de julio de 2007

Bitácora

Abre lentamente los ojos, esta boca arriba, gira su cabeza hacia la izquierda y mira el reloj; son las 4:57 a.m. Se ha despertado con una extraña sensación, indescriptible; nada agradable. Mira de nuevo hacia el techo y observa todo lo que la luz de la luna le deje ver. Solo mira, mientras intenta decifrar que es esa sensación que experimenta.

Despuiés de un tiempo vuelve a voltear al reloj; quien, con su luz de neón y números grandes le dice que son las 5:30, además de que le avisa, mediante un pequeño pero notorio foco rojo, que la alarma sonará a las 6:30. Piensa para sí, "-Es tarde, debo dormir-" y se medio dispone a dormir, paradójicamente, sin cerrar los ojos... Se irrita un poco a causa de la extrana sensación, y decide continuar observando todo lo que la luz de la luna ilumine dentro de esas cuatro paredes. Mira de nuevo el reloj... "-Carajo, ya son cuarto para las seis, con lo que me choca despertarme a estas pinches horas, luego me ando durmiendo en la escuela-" se dice para sí. Sonríe paradójicamente y vuelve a hablar: "-Pues total, si me tenía que levantar a las seis, pues de una vez-". Sabe que un día anterior fue pesada la jornada así que esta segura de que nadie despertará.

Se levanta, se pone el pantalón del uniforme (el primero a la mano) y abre un cajón de la cabecera; el que está abajo del reloj. Mete la mano hasta el fondo, y a tientas; por que la luz de la una no penetra el viejo cajoncito, mueve papeles, prendas pequeñas y una colorera, hasta encontrar lo que busca. Saca la mano empuñando una cajetilla de Marlboro, con un espacio vacío de cigarros suficiente para que quepa su encendedor. Saca un cigarro y el encendedor, se pone los tenis y sale silenciosamente y sin abrigo, pues cree que la noche es tan bella como para ser fría. Baja los doce escalones de su casa, cruza la sala y sale por la puerta de la cocina (la única puerta) atraviesa el patio y va a un patio trasero, una vez ahí; se acomoda en una piedra, que ya bien conoce, y enciende su cigarro.

Mientras fuma, sigue tratando de decifrar aquella sensación extrana, pero su crebro se cansa rápidamente, asi que se dedica mejor a observar el brillo de la luna y lo hermoso que se ven las cosas cuando la luna las alumbra, esa luz a medias que tambien la alumbra a ella, se sentía en cierta manera feliz de que la luna la iluminara. Empezaba a sonreir cuando algo la hizo brincar y enfadarse, siente los labios calientes, se los iba a tocar con la mano derecha, cuando vio, entre sus dedos índice y medio (de esta misma mano) la colilla del cigarro a punto de quemarle los dedos. Intenta recordar que fue lo que le quito sus felicidad tan efímera, y se da cuenta de que mientras su cabeza volaba, su cuerpo fumaba, sonrió, de nuevo paradójicamente y penso "Shiale, ni lo disfruté, ni me di cuenta como ya es por impulso". Entro a la cocina, ya de regreso y miró el reloj; -tuvo que, literarmente pegarse a este por no tiene luz neón ni es de números grandes, es de manecillas- 6:05 de la madrugada, se observó bien y se dio cuenta que traía el uniforme puesto; excepto por la playera... "al fin y al cabo es blanca" -pensó- "y yo quiero un poco de aire". Asi que subió, saco toda su cajetilla y la guardó en su bolsa, bajo mas rápido que la primera vez y tomo sus cosas "de paso", se aseguró que llevara al menos 10 pesos y salió de la casa, metiendo la llave a la chapa por fuera para evitar el menor ruido. Ella sabía que no iban adespertar hasta después de las 7:00, y a esa hora ya debería estar en la escuela pero mas valía asegurarse.

Salio como iyendo a la escuela, pero se siguió derecho, al doblar la cuadra de su casa saco otro cigarro y comenzó a fumar. Caminó durante 15 minutos para llegar a su destino (el cual no sabía que era su destino hasta que setuvo frente a el). A las 6:20 a.m estaba frente a un minisuper con servicio de 24 hrs. asomó la cabeza por la ventanita de la puerta y dijo -Buenos días- sin poder evitar el tono preocupado y molesto debido a la extraña sensación.

El chico a cargo asomó desde el mostrador y la reconoció inmediatamente -¡Hola!- dle dijo mientras buscaba la llave para dejarla entrar. Mientras abría el le dijo -¿Qué milagro? ¿Y ahora por que madrugaste?

-Pues ya vez- contestó nuestra chica

Entró y se dirigio inmediatamente a la máquina de café y se preparo uno, mintras lo cargaba de azúcar dijo (tal vez de nuevo para si tal vez no): -Presiento que será una jornada muy larga- A lo que el chico respondió -¿Sensaciones extrañas?-. Ella solo sonrió y se sento con su café, mientras esperaba a que se enfraiba un poco saco otro cigarro y fumó mientras observaba la luna.

Por su parte, el chico al ver que se sentaba con una expresión de sensación extraña le preguntó -¿qué no es muy temprano para fumar?-
-Como siempre-
-¿Cómo siempre te lo pregunto o como siempre fumas?
-Je! Cualquiera de las dos-

Sacó su diagnostico y decidió poner en sus oídos a Nach, a un volumen audible, empezó con "El camino del guerrero": sacó también un Marlboro de su bolsa, y un encendedor del mostrador, encendió su cigarro y acomodó el encendedor para venderlo después, junto a nuestra chica y la miró por un momento, pero ella; a pesar de darswe cuenta, siguió mirando la luna.

Ella reaccionó de nuevo cuando su cigarro lo quema la boca y esto le molesta. Para evitar retroalimentar su coraje, le dice al chico -Qué ¿No piensas abrir?- (Ella sabe que las puertas deben abrirse a las seis) -Nel, a las siete. La neta hace un buen de frío- Y los dos sonríen, ella mira el reloj de pulso que su mamá le ha prestado: -cinco para las siete-
-¿A qué hora entras?-
-A las siete, pero no quiero ir ahorita-
-¿Por?-
-Sensaciones extrañas-
Ambos sonríen, solo ellos se entienden, no saben por que extraña razón
-¿Tu a qué hora sales?- Pregunta ella.
-A las ocho, o hasta que lleguen esos güeyes a cubrirme, ni modo que deje aquí solito-
-Veamos entonces el amanecer-

Ambos regresan a su posición anterior, no sin antes ofrecerse un cigarro y fuego el uno al otro. Ella se da cuanta que el café ya esta frío y toma tragos de café mientras fuma y mira...

A las ocho treinta salen juntos de ahí, el a su casa y ella a la escuela, a el le que da de paso la escula; asi que la acompaña a que entre a su segunda clase del día.

Desde que entra, invierte seis horas de su día, mas que en clases, intentando descifrar esa sensación que inició todo. Ella se torna demasiado irritable por no poder descifrarla, -además de su falta de paciencia-

Sale -al fin- de la escuela y se dirige a su casa, ya sin una expresión que exprese cualquier cosa, cansada de descifra sin conseguir nada, al salir enciende inmediatamente otro cigarro y camina sola, mirando hacia el suelo.

El cigarro se ternima poco antes de llegar a la esquina de la cuadra dónde su casa, y en la esquina ella se mete un 'chichle' con sabor a Colgate a la boca.

Llega asu casa, hace lo que tiene que hacer antes de que se lo pidan -lo que menos quiere ahora- y se sienta frente a la computadora, la enciende, y comienza a sustraerse lo mas que puede -sin darse cuenta de que lo hacía- Abre verntanas, cierra ventanas, escribe demasiado, se satura, escucha música, mira videos, curiosea a ver que nuevo se encuentra, en fin... Hace de todo, menos contactarse con su hermano (siempre lo hace), Mira el reloj de la PC: las 2:23 hrs. del día siguiente. Ella ya no tenía mas que hacer, enciende un cigarro, ("Ya se durmuieron todos y este cuarto siempre huele igual") y se recarga cómodamente en la silla mientras mira fijamente el monitor. Mira su cigarro de vez en cuando; no quiere volver a quemarse. Ya que esta a punto de terminarselo, recuderda rápidamente desde el inicio de su día hasta el momento, sonrie de nuevo, -paradójicamente- y apaga la colilla mientras dice para sí. -Tenía razón, fué una jornada larga-. Sube a su cuarto, -antes de que llegue su hermano que no debe tardar- y se mete en las cobijas mientras intenta recordar en que momento se perdió su extrana sensación.

Mira hacia el techo, obserando como la luna ilumina algunos rincones y voltea hacia el reloj: 2:30 hrs. lo mira por un rato, saca la mano de las cobijas y voltea el reloj hacia la barda, ella, se voltea del lado contrario y cierra los ojos dispuesta a dormir -"Hoy me desvelé, es tarde. mañana srá una jornada pesada"-...

¡Gracias!

3 personas comentan y Pandora se los agradece:

Anónimo dijo...

esta bien chingon eres una chava super chevere te felicito nena hermosa

Anónimo dijo...

k show shika? la neta esta shido tu blog , saludos aki del luxxxo de vhsa tabasco y del crew gs. paz shika hermosa

Anónimo dijo...

hola mugocha, sabes eres una niña especial para mi, y la neta expresas tus sentimientos bien chido, ojala y nunca cambies, y ya sabes aqui el mugroso presente para lo que necesites. TQM